Bromelaína

« Regresar al Índice del Glosario MMF
Que es

Bromelaína, también denominada bromelina es el nombre genérico que reciben una familia de enzimas proteolíticas es extraída del tallo o del fruto de la piña (Ananas comosus). A diferencia de la mayoría de las enzimas digestivas, la bromelaína es activa en un rango de pH bastante amplio (4.5-9.8) lo que le permite actuar tanto en el ambiente ácido del estómago como en el ambiente alcalino del intestino delgado, sin embargo es poco estable al calor por lo que los tratamientos térmicos o unas malas condiciones de almacenamiento pueden inactivarla.

La bromelaína degrada los enlaces peptídicos de las proteínas, razón por la que suele ser utilizada en gastronomía y la industria alimentaria para ablandar las carnes.

La bromelaína se produce principalmente en Japón, Hawaii y Taiwán. Hay otras frutas que contienen enzimas con propiedades similares, este es el caso de la papaya, cuya enzima se denomina papaína.

Beneficios

Sistema digestivo.

La bromelaína debido a su función proteolítica es útil como enzima digestiva. Resulta efectiva como ayuda del proceso de digestión ingerida vía oral para las personas quienes presentan alteraciones de la digestión.

La bromelina se ha utilizado con éxito como una enzima digestiva, especialmente en casos de pancreatectomía, insuficiencia pancreática exocrina y otros desordenes en los que se presenta una carencia enzimática.

La bromelina se ha empleado comúnmente para curar úlceras gástricas. En estudios en experimentación animal ha observado que se mejora la absorción de sustancias como el azufre (50%) y de la glucosamina (30-90%). El aumento de la absorción de estas sustancias puede permitir que la mucosa gástrica cure más rápidamente.

Sistema cardiovascular.

Además de su efecto en el tracto digestivo, la bromelaína tiene otros efectos en el cuerpo humano. A pesar de que se absorbe intacta, su actividad proteolítica es rápidamente desactivada una vez que entra en el plasma.

El consumo de bromelaína tiene efecto antiagregante plaquetario además de ejercer una actividad fibrinolítica directa sobre los coágulos sanguíneos previniendo la aparición de trombos y posibles accidentes cardiovasculares.

La bromelaína es capaz de modificar la síntesis de tromboxanos y postaciclinas, sustancias proinflamatorias, ejerciendo una acción antiinflamatoria.

Debido a estas propiedades la bromelaína se emplea para la insuficiencia venosa crónica (íntimamente relacionada con las venas varicosas), hemorroides, otras enfermedades de las venas, hematomas, así como en osteoartritis, artritis reumatoide, gota, colitis ulcerativa, dismenorrea o dolor menstrual. Sin embargo, aún existe poca consistencia de las evidencias científicas y son necesarios más estudios.

Prevención y recuperación de lesiones.

La bromelaína también presenta actividad antiinflamatoria en tejidos blandos como los músculos mejorando la recuperación de lesiones o la recuperación de operaciones quirúrgicas.

En un estudio en el que participaron 146 boxeadores se sugiere que la bromelaína puede ayudar a que los hematomas desaparezcan en menos tiempo.

Las personas que practican ejercicio intenso sin estar acostumbradas pueden experimentar un conjunto de síntomas llamados dolor muscular de comienzo tardío, también conocido como agujetas (DOMS), que consisten en dolor, menor flexibilidad y debilidad de los músculos involucrados. La suplementación con bromelaína previene la ruptura de las células musculares y resulta eficaz para reducir el dolor, prevenir el edema y favorecer la recuperación después de un ejercicio intenso con un componente excéntrico elevado. También reduce la disminución de la fuerza y acelera la recuperación al prevenir la disminución de fuerza asociado a esta situación. La bromelina ayuda a prevenir las lesiones por fatiga, previene la citolisis precoz y favorece la regeneración de las fibras musculares.

También se ha estudiado el consumo de bromelaína antes y después de someterse a una operación quirúrgica y se observó que se reduce el dolor y la inflamación en pacientes sometidos a diferentes cirugías como tratamiento de cataratas, cirugía dental, nasal, podal…

Otros beneficios del consumo de bromelaína.

La bromelaína se puede aplicar en forma de crema pudiendo ser beneficiosa para cura y para la cicatrización de quemaduras u otras lesiones similares. Un componente no proteolítico de bromelaína (escarasa) es el responsable de este efecto.

La bromelaína parece incrementar la absorción de diferentes medicamentos, especialmente de antibióticos, como es el caso de la amoxicilina y la tetraciclina. Esto puede ser útil para reducir la dosis necesaria de antibióticos.

La bromelaína también presenta actividad mucolítica, característica por la que es empleada para tratar la sinusitis. En un ensayo clínico doble ciego, 48 pacientes con sinusitis de moderada a severa recibieron bromelaína o placebo durante 6 días como complemento de la terapia convencional para la sinusitis, con antihistamínicos, analgésicos y antibióticos. Al finalizar el estudio, la inflamación se redujo al 83% en aquellos que consumieron bromelaína en comparación al 52% de reducción del grupo placebo. En cuanto a la dificultad respiratoria se alivió en un 78% en el grupo tratado con bromelaína y al 68% en el grupo placebo. En resumen, se observaron resultados de buenos a excelentes en 87% de los pacientes tratados con bromelaína comparado con el 68% en el placebo.

En la actualidad se están estudiando efectos antitumorales potenciales de la bromelaína, varios estudios, tanto en animales como humanos, parecen indicar que podría tener efecto anti metástasis, pero es necesaria más investigación al respecto.

Usos
Dosis

Bromelina ha demostrado beneficios terapéuticos en dosis tan pequeñas como 160 mg/día, sin embargo, para la mayoría de las condiciones, los mejores resultados se producen con dosis de 750-1000 mg/día. Se consideran dosis habituales cantidades de 500-1000 mg/día y de hasta 2000 mg/día.

La mayoría de la investigación con bromelina se ha hecho dividiendo las dosis en cuatro tomas diarias. Los resultados tras los estudios indican que la respuesta suele depender de la dosis.

Cuando se desea un efecto terapéutico de la bromelaína y no en relación a la mejora de la digestión se recomienda consumir alejado de las comidas. En la prevención del daño por lesiones deportivas o cirugías se recomienda consumir al menos 72 horas antes del evento.

Efectos Secundarios

La bromelaína no se considera una sustancia tóxica. Los rangos de seguridad son muy amplios y no se ha observado toxicidad incluso en dosis elevadas o durante largos periodos de tiempo. Tampoco se han observado efectos secundarios importantes en los estudios realizados en humanos en las dosis convencionales, aunque en algunos casos han aparecido molestias gastrointestinales o reacciones alérgicas leves.

En modelos animales dosis de más de 460 mg de bromelaína pueden alterar la frecuencia cardiaca o elevar la presión arterial, por precaución se recomienda no superar estas dosis en personas con alteraciones del corazón o hipertensión.

Teóricamente la bromelaína podría alterar la capacidad de coagulación de la sangre en un pequeño grado, por lo que no se recomienda combinarse con medicamentos anticoagulantes como la warfarina o heparina sin la supervisión de un médico.

Según un pequeño estudio realizado en animales, bromelaína podría interactuar con medicamentos sedantes tales como benzodiazepinas, aumentando su efecto, igual que también puede aumentar los niveles sanguíneos de diferentes antibióticos.

No hay información sobre su uso en lactancia o embarazo por lo que no se recomienda su uso.

Referencias
  1. Monograph Bromelain. Alt Med Rev, 1998, 3(4): 302-5
  2. Kelly GS. Bromelain: A Literature Review and Discussion of its Therapeutic Applications. Alt Med Rev, 1996, 1(4): 243-267
  3. Steven Bratman, MD. Last reviewed Marzo 2002 by EBSCO CAM Medical Review Board
  4. Spaeth GL. The effect of bromelains on the inflammatory response caused by cataract extraction: a double-blind study. Eye Ear Nose Throat Mon. 1968;47:634 – 639.
  5. Raquel Blasco Redondo. Jacobo A. Rubio Arias. Anna Anguera Vilá. Arantxa Ayllón Sánchez. Domingo J. Ramos Campo. José F. Jiménez Díaz. Suplementación con bromelina en el daño muscular producido durante el ejercicio físico excéntrico. Estudio Bromesport. Archivos de medicina del deporte 2012, 14(4):769-783
  6. Bromelain monograph. Alt Med Rev, 2010, 15(4):361-68
  7. NYU Langone medical center: Bromelaína.
« Regresar al Índice del Glosario MMF