Prunus Armeniaca
El albaricoque es el fruto del albaricoquero (Prunus armeniaca, Armeniaca vulgaris). El albaricoquero es un árbol de la familia de las rosáceas. Esta familia incluye más de 2.000 especies distintas distribuidas por regiones templadas de todo el mundo. El albaricoque se consume de manera habitual como una fruta fresca, aunque también es empleado en la fabricación de zumos, mermeladas y los denominados “orejones”, que son albaricoques secos.
El albaricoque es un fruto de carne jugosa, firme y sabor dulce. Los albaricoques presentan diferente tamaño, color, jugosidad e incluso temporalidad dependiendo de la variedad, pero principalmente se caracteriza por madurar de mayo a septiembre. Son redondeados con un surco en la parte media, presentan un tacto aterciopelado, tonalidades entre rojizo, amarillo y anaranjado; o incluso un color rosado en su madurez, presentan una semilla en forma de almendra en el interior del fruto.
El albaricoque presenta un bajo aporte energético, incluso comparado con otras frutas. Cada 100 gramos de porción comestible aporta menos de 40 kcal. Contiene un alto contenido de agua y bajo en hidratos de carbono, apenas contiene proteínas y grasas. Presenta elevado contenido en fibra.
En cuanto a su contenido en minerales destaca por un elevado contenido en potasio seguido de magnesio y de calcio, aunque el calcio procedente de esta fuente es de inferior aprovechamiento que el calcio procedente de otras fuentes alimenticias. También presenta cantidades adecuadas de hierro.
El albaricoque es elevado en pro-vitamina A. El beta-caroteno o pro-vitamina A se transforma en vitamina A en el organismo humano conforme este lo necesita, siendo esencial para la visión, para el buen estado de la piel, cabello, mucosas, huesos y para el buen funcionamiento del sistema inmunológico. Además, tiene propiedades antioxidantes. El albaricoque también proporciona un elevado contenido en vitamina C, con acción antioxidante, así como vitamina E, pudiendo llegar a alcanzar el 49% de la cantidad diaria recomendada de esta vitamina con el consumo de una ración formada por 3 albaricoques diarios.
El albaricoque presenta en su composición ácidos orgánicos como el ácido málico y el ácido cítrico. Estos ácidos se encargan de potenciar la acción de la vitamina C, favorecer la absorción intestinal del calcio y de facilitar la eliminación del ácido úrico. Los albaricoques maduros presentan menor cantidad de estos ácidos.
En la medicina asiática, se considera que el albaricoque tiene propiedades medicinales y se recomienda su consumo regular como antiséptico para personas con enfermedades respiratorias.
Debido a sus componentes nutricionales, a su alto contenido en agua y a su bajo contenido en kilocalorías, el albaricoque es un alimento ideal a añadir en dietas de adelgazamiento y para deportistas, ya que ayuda a una correcta hidratación gracias a su elevado contenido de agua. Por otro lado, debido a su elevado contenido en fibra, mejora el tránsito intestinal, aliviando el estreñimiento.
Gracias a su elevado contenido en pro-vitamina A que posteriormente será trasformado en vitamina A por el organismo humano, es de especial interés para una correcta visión, para el buen estado de la piel, del cabello, de las mucosas, de los huesos y para el buen funcionamiento del sistema inmunológico, además de tener propiedades antioxidantes. Su contenido en hierro contribuye a cubrir los requerimientos de este mineral, ayudando a combatir la anemia ferropénica.
- Belleza y Cosmtica: Piel
- Sistema Digestivo: Trnsito Intestinal
- Salud & Bienestar: Vitaminas & Minerales
- Promocin de la Salud: Cuidado de la Salud General
No se dispone de una cantidad máxima diaria de consumo de albaricoques, pero si se estima que el peso medio de un albaricoque es de alrededor de 50 gramos, considerándose una ración normal unos 150 gramos, es decir, tres albaricoques.
En casos de anemia se recomienda consumir de 3 a 5 albaricoques diarios durante diez días.